¿Para qué sirve Turbopol?

Es un descalcificador ecológico no salino que soluciona el problema de la cal (carbonatos cálcico y magnésico), convirtiéndola en minerales de calcio y magnesio. De esta forma conseguimos que no precipite, protegiendo tuberías, electrodomésticos y la piel al ducharnos.


A diferencia de los descalcificadores salinos, sirve para el agua de riego, desincrusta la cal que previamente ha precipitado en las tuberías, no cambia el PH del agua, no elimina el cloro, no oxida las tuberías, no necesita conexión eléctrica, ni cambios de resina, ni mantenimientos mensuales, ni sacos de sal, ni derrocha agua, ni contamina con salitre, ni precisa de recogida de vertidos, etc. Es la mejor opción, tanto en comodidad, como en economía, como para el medio ambiente.

Dúchate

Dúchate sin picores

El agua dura es nociva para la piel, dañando la barrera de protección, lo que suele provocar el desarrollo de eccemas o la aparición de dermatitis atópica.

Deja de estropear tu pelo al ducharte

Deja de estropear tu pelo al ducharte

Un alto contenido en cal afecta notablemente a la hidratación de tu pelo y puede dejar tu cabello como apelmazado, áspero, rizado y difícil de peinar, y sentir tu cuero cabelludo seco, con picores e incluso con caspa.

Alarga la vida de los electrodomésticos

Alarga la vida de los electrodomésticos

La cal en el agua provoca averías graves en lavadoras y lavavajillas, especialmente en la zona de la resistencia o en las bombas que regulan el paso del agua, acortando en varios años la vida útil.

Protege tu grifería

Protege tu grifería

La cal, es decir, carbonato cálcico y magnésico, se acumula alrededor de los grifos y en su interior, estropeándolos y afeándolos.

Presión del agua

Presión del agua

La cal se adhiere a las paredes de las tuberías y las estrecha, provocando atascos y problemas de presión en el agua. Es como el colesterol malo en las arterias.

Protege las bajantes

Protege las bajantes

La cal provoca estragos en las bajantes, estrechándolas y provocando atascos, lo cual obliga a gastos continuos en cubas para desatascar.

No estropees las resistencias

No estropees las resistencias

La cal aumenta el consumo de electricidad y estropea las resistencias. Por cada mm. de cal en tubería perdemos 16% de energía. Pasamos de clase A a D en pocos meses.

Ahorro asegurado

Ahorro asegurado

Ahorramos detergentes en la lavadora, alargamos vida de electrodomésticos, ahorramos energía eléctrica, evitamos atascos, cubas y roturas de tuberías, etc.

¿Por qué el descalcificador ecológico Turbopol y no un descalcificador salino?

Sin pesados sacos de sal

Sin pesados sacos de sal

Evitamos comprar, almacenar y cargar con sacos de sal. No tendrás que estar pendiente del nivel de sal ni contaminarás el medio ambiente con salitre.

Elimina la cal que ya tienen tus tuberías

Elimina la cal que ya tienen tus tuberías

Turbopol crea un proceso de ionización que elimina la cal que previamente existe en las tuberías, creando además una capa protectora.

Equipo de tamaño reducido

Equipo de tamaño reducido

Ya no es necesario reservar espacio para un descalcificador. Turbopol apenas ocupa espacio y se conecta tras el contador de agua o previamente a la batería de contadores (en comunidades de propietarios).

Evita el derroche de agua

Evita el derroche de agua

Los descalcificadores salinos atrapan la cal con una resina que se ha de limpiar con sal y lavar con abundante agua, que es expulsada al medio ambiente junto con salitre. Turbopol no.

Un mantenimiento al año

Tan solo un mantenimiento al año

Olvídate de mantenimientos mensuales, dado que no necesitarás sal, ni los carísimos cambios de resina, ni las revisiones para comprobar durezas en el agua.

Equipo autónomo

Equipo autónomo

No es necesario comprobar la dureza del agua continuamente, ni echar sal. Olvídate de que lo tienes, salvo por los beneficios de tenerlo.

Evita el óxido y la corrosión

Evita el óxido y la corrosión

Turbopol no cambia el PH del agua y, por tanto, ésta no cambia los grados que tiene y no vuelve el agua corrosiva, protegiendo así las tuberías.

Evita que el agua se despotabilice

Evita que el agua se despotabilice

No elimina cloro, manteniendo así el nivel de protección microbiológico en la instalación, cumpliendo con la nueva normativa 487/2022, así como el RD 3/2023 y la HS4.

Reduce tu factura de electricidad

Reduce tu factura de electricidad

No sólo por eliminar la cal, sino porque Turbopol no necesita estar conectado a la corriente.

Apto para línea de riego

Apto para línea de riego

Incluso se puede configurar para ionizar el agua, consiguiendo ahorros en abonos y consumo de agua, con mejores resultados en los cultivos.

No precisa procesamiento de residuos

No precisa procesamiento de residuos

Varias comunidades y países están obligando incurrir en estos costes para evitar contaminación del medio ambiente. El agua con salitre de descalcificador está cada vez más regulada.

Evita roturas de tuberías

Olvídate de los golpes de ariete (subidas fuertes de presión) que destrozan descalcificadores salinos y tuberías, llenando todo de resinas.

Malla de 20 micrones

Malla de 20 micrones

Que evita que pasen los materiales más grandes (metales, gravilla, óxido, parásitos de agua, etc.). Después, un émbolo magnético situado dentro del filtro, atrapa todos los materiales pesados que lleva el agua.

Recubrimiento de plata

Recubrimiento de plata

Para prevenir la aparición de hongos y bacterias en el equipo, cumpliendo así la normativa HS4.

Cumple ampliamente con la normativa

Cumple ampliamente con la normativa

No sólo con la HS4 sino que, al no variar las características físico-químicas del agua proveniente de la red, previene la proliferación de la legionela, como indica la normativa 487/2022, así como el nuevo RD 3/2023 .

Made in Spain

Made in Spain

Turbopol se produce en España, con I+D+i propio, y además cuenta con servicio de asistencia técnica y post-venta.

Garantía de 7 años

Garantía de 7 años

No solo cumplimos con los 3 años que obliga la UE, sino que lo elevamos a 7 años.

Esquema de instalación del descalcificador ecológico Turbopol

Análisis de costes

¿Para quién es?

¿Para quién NO ES?

PREGUNTAS FRECUENTES

Sí, realmente funciona. Más de 1.000 instalaciones nos avalan. No solo impide la formación de cal, sino que además elimina toda la que previamente hay incrustada en las tuberías e impide que se pueda volver a formar.

Existen diferentes sistemas que se pueden asemejar, o que funcionan por magnetismo u otros métodos, pero la eficacia es relativa.

Por ejemplo, existen algunos que transforman la calcita en aragonita, es decir, que es como machacar el azúcar para transformarla en azúcar más pequeño. No se adhiere, pero sigue estando, y precipita posteriormente.

El problema radica en el alcance que tienen, de apenas unos metros de tubería tras el equipo. Y también en la eficacia, puesto que aparentemente separan calcio, magnesio y bicarbonatos, pero luego vuelve a precipitar, creándose la cal nuevamente.

Básicamente la desincrusta por completo, gracias al proceso de ionización del agua que bombardea esa cal adherida a las tuberías y electrodomésticos.

Esto es posible gracias a las diferentes unidades de neodimio que oscila en el interior del embolo, produciendo un efecto ionizante. Cada equipo esta calibrado para conseguir la máxima efectividad. Cuando más residuo seco, más ionizas el agua que circula por las tuberías, y más libera la cal previamente incrustada.

Sí, se pueden e incluso es aconsejable, dado que al ionizar el agua se estimulan las plantes y los árboles en la agricultura, reduciendo el agua necesaria y el abono que se emplea.

Tras el contador de agua, para que de paso a toda la vivienda o establecimiento.

Y también previamente a la batería de contadores, cuando se trata de una comunidad de propietarios.

Depende del diámetro de la tubería donde se ha de instalar. Puede ser de ¾”, 1”, 2”, 2,5” o 3 “. Mayores diámetros se preparan a medida.

Medidas del descalcificador ecológico Turbopol

Los descalcificadores salinos precisan de gran cantidad de agua para su autolimpieza, muy al contrario de los equipos Turbolpol, que requieren de muy poca agua para su autolimpieza (entre 2 y 5 litros).

Los descalcificadores salinos, generan salmuera para su limpieza y se vierte este contaminante a la tubería de la red pública. Con Turbopol, eliminamos sedimentación, agua sucia, lo que no genera contaminación al medio ambiente.

Al ser un sistema totalmente hidráulico, no generamos consumos de energía, con el consiguiente ahorro en la factura de electricidad.

No se han prohibido los descalcificadores salinos, pero sí el vertido de salmuera procedente de dichos descalcificadores salinos. Esto ocurre hace años en Baleares y Canarias y se prevén más comunidades en breve. La idea es proteger al medio ambiente, porque la salmuera estropea las tierras y contribuye a la desertificación.

Además, tiene mucho que ver con la Agenda 2030 con el tratamiento de las aguas salubres.

No, no se debe. Por varias razones. Una de ellas es la despotabilización que produce un descalcificador salino al eliminar el cloro o parte del mismo, despotabilizando el agua. Esto es debido al filtro de carbón que tiene un descalcificador salino para proteger la resina.

Y la otra es que el agua posee salitre procedente del descalcificador y ese exceso de sal puede dañar la salud y alterar la tensión, pese a que la cantidad sea pequeña.

Se podría beber, dado que el agua que nos llega es potable, y el descalcificador ecológico no salino Turbopol no afecta a la potabilidad. Simplemente tendremos minerales de Calcio y Magnesio, así como bicarbonatos, de forma separada, y no en forma de carbonato de calcio o carbonato de magnesio.

Por tanto, es incluso más saludable, ya que evitamos piedras en vesícula y riñón, en comparación con beber el agua con cal.

Dicho esto, el agua del grifo es potable pero no siempre saludable. Que los sulfatos, nitratos, cloro, metales pesados, etc. estén bajo los parámetros legales, no significa que sea la mejor agua que podamos beber. Por tanto, sí es aconsejable tener un sistema de purificación del agua para beber y cocinar pese a tener instalado un descalcificador ecológico no salino Turbopol.

Muy, muy, muy poca. Básicamente tiene una electroválvula que expulsa sedimentos como microplásticos, cal no disuelta que pueda llevar la tierra, partículas de metal, etc., en forma de arenilla.

Realmente está rechazando agua sucia (sedimentación), no agua contaminante. Con un minuto es suficiente entre una y tres veces a la semana (máximo). Es un efecto de succión. Representa entre 3 y 5 litros de agua. Es autolimpieza.

Eso representa menos de 5 euros en agua al año en una vivienda donde resida una familia de 4 personas.

Básicamente evita que el agua se vuelva corrosiva. Ese es uno de los grandes problemas de los descalcificadores salinos. Que requieren supervisión constante, para asegurar los grados de cal mínimos que eviten dicha corrosión.

El descalcificador ecológico no salino Turbopol no requiere de supervisión, dado que no atrapa el cloro, sino que separa el carbonato de calcio y de magnesio convirtiéndolos de nuevo en minerales y bicarbonato, evitando que precipiten. Y en ese proceso no se alteran los grados de cal.

Turbopol no produce ninguna variación en el PH del agua.

Porque cuando el agua pasa a través un sistema de descalcificación salina, se produce una variación físico-química en el agua, la cual puede llegar  a variar la potabilidad del agua, ya que produce un aumento en los niveles del sodio, variaciones de PH y reducción de los niveles de cloro.

No, no la altera. Esto es especialmente importante, porque la acidificación del agua es fuente de enfermedades.

El cloro se desactiva por debajo de un PH de 6.5 y por encima de 9. Por tanto, la batería de la legionela, el E-Coli, etc., que están latentes en el agua pero inactivas gracias al cloro, pueden proliferar.

En comunidades de propietarios, obradores de pan, lavanderías, hoteles, lavaderos de coches, residencias y en la industria.

Es muy aconsejable por la reducción de costes individuales, como en el caso de las comunidades de propietarios.

Respecto a obradores de pan, o establecimientos con manipulación de alimentos, nos aseguramos de que el agua no está despotabilizada y con ello evitamos riesgos de, por ejemplo, la Legionella.

Lo mismo ocurre en la industria y en los lavaderos de coches. Siempre que se utiliza el agua con mucha temperatura tenemos riesgo de la Legionella.

No solo la cumple, sino que va mucho más allá.

En concreto, no solo posee el certificado UNE-E13443-1, sino que además se adecúa perfectamente al Real Decreto 487/2022, de 21 de junio, por el que se establecen los requisitos sanitarios para la prevención y el control de la legionelosis. Y también al nuevo Real Decreto 3/2023, de 10 de enero, por el que se establecen los criterios técnico-sanitarios de la calidad del agua de consumo, su control y suministro.

Turbopol también cumple con las características técnicas del Código Técnico de Edificabilildad HS4.

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